26.9.07

EL CAMINANTE (2007 ... )

lucecita del pregón de la mañana / purifícame / que tu misericordia / que tu racimo de dones / que tus santitos me abracen / me disculpen del ocaso tan digno del pecado / yo no merezco ese cuerpo que deja caer sus ropas al pie de la cama / como una lluvia de verano / y me mira con su boca profunda boca de plegarias / me dice eres desprovisto no tienes brazos tan largos para anudarme / tienes una rareza impropia me dice / deberías hacerte sanaciones no tan triviales como escribir / como irte cuando apenas acabas de llegar repite con su cara cubierta con las manos / ya se que no soy un ángel / más bien tengo una gravidez que no me deja mover / menos suspenderme en el aire frente a sus ojos / como una pluma bajo el viento sur / ora por mi / bendíceme / lucecita pregonera de la ceguera / yo te pido por mi / considérame / porque puedo hacer / eso si / que ella llueva siempre / o que me espere naturalmente / y a veces / considera lo que he logrado lucecita / puedo hacer que me mire sin que pueda pronunciar una palabra

(I)

de este lado / que no es el mismo / ya no me parezco a mi

me simulo cuestiones de tal naturaleza: / sinrazones / bienaventuranzas de hormigón y saliva / preámbulos de mitos y migajas / porque es dable a esta altura / que haya vértigo de vuelta al mundo

otras tentativas: / panadero en una calle angosta de praga / mis manos sobre una trompeta imitando a winton marsalis en un bar a orillas del mar bohai / o buscar oro con una de tus medias en la cañada / no se / todo está por verse / como si los ojos se inclinaran frente a la belleza silenciosa de lo nunca mirado

(II)

alguien deshizo el paraíso y hoy busca respuestas en un costurero / en el orden extraño que le dictan sabiamente las agujas / pide ayuda sin embargo: / mírame / señálame el lugar de la sutura

antes dijiste andá con cuidado no vayas como un loco / momentito: / los locos no van / dan vueltas sobre si mismos como una hoja seca que cae / ya supe morirme de mi muchas veces / y aún sigo prologando otras muertes / es que la muerte tiene esas provocaciones esa paciencia

me sorprende entonces llorarme leyendo pequeños carteles abrazados a una torre de luz / carteles del tipo arreglo cañerías llamar a tal o cual / pasa que él se subió a una alta escalera para mostrarle al mundo con su cartelito que él puede hacer correr el agua donde no corre / minúsculos ríos dirá indicando que lo ha logrado cuando le extiendas su paga / minúscula paga para un hombre que quiere redimirse

(III)

las ciudades son todas iguales y distintas / a todas les duele la soledad a una altura profundamente humana / y aunque podría hablar de esa urgencia tan temida / (cosas atroces repito vanamente) / pliego ese sabor a nada tan vulgar como si fuera un papelito

es que a veces me provoco cierta ingravidez / vos ya sabés / como un globo que entretiene la espera de la caída / un autito de lata a cuerda que renguea su distancia / ninguna herida sangra tan brutalmente como una sudestada que pueda alejarte definitivamente

¿qué es un instante, una línea que se curva sobre el monte de la luna, un puente de cenizas para llegar?

es admirable lo que cada noche trae consigo / uso espejos cóncavos y convexos para desalmar la realidad / resguardo el espejismo / me atribuyo también otras derrotas pero no es momento

(IV)

Es que hoy yo tengo / bien podría decirse / o tuve aunque deba retractarme / esa extrañeza no otra / esa que te brota desde muy adentro / que va a salir pronto como géiser como recién nacido / y es de temer / seguro / pero casi no duele ya / canturrea: nadie mezquina salmuera cuando es de otro la herida la la lalá / come tulipanes eso si / se alimenta de flores que no crecen cerca

ayer no pude ocultar que viene viniendo en medio de la calle y los vecinos la miraban como un coso malo / no sabía se comentaban la verdulera y el carnicero que a este chico le irrumpían esas futuras erupciones / por lo menos fuera fiebre dijo en voz baja la panadera / le saldrían animales salvajes pequeños asteroides y miraría quietito con ternura / sin embargo va y viene

¿y quién espera? / ¿qué debe esperar? / me gustaría que esta luz fuera corpórea digo además / me haría real / y buscaría un cono de sombra quizá para troquelar tu boca / y gritarme de vos mientras el bombardeo no cesa / gritarme cosas simples como es necesario pintar las paredes / boberías

es que a veces todo se detiene / y más tarde no llega tan rápido / decía / una extrañeza de la que desconfío cada vez / veremos

(V)

supongamos que sos la que me reescribe / la que me transita desde antes / supongamos por un momento que soy quien te piensa / quien te anuda a una búsqueda

supongamos que somos esa invención que el tiempo anida y no deshace / esa dádiva del paraíso / supongamos a esta altura que somos los que nos sujetamos de este lado / como si el otro no debiera confinarse al olvido / supongamos que en algunos momentos entre yo y yo estás vos / y que entre vos y vos estoy yo / ya no la soledad ni el enemigo

ya no el niño blanco abofeteando a sus muñecos negros ni el niño negro peinando su peine blanco / supongamos / sino más bien la vida fuera otra cosa: un escenario azul que nos demore

supongamos que yo escribo al dorso de tus labios: / la noche enciende el misterio como el mediodía consume las sombras / esas formas imitando el vacío / gestos que se apagarán en la caída en la gravitación natural del encuentro / y digan tus labios cualquier cosa al dorso de estas palabras que no son sino tu ausencia / supongamos

(VI)

amores a destiempo a dos esquinas prematuros / los trenes cambian sus horarios cada tanto / amores a trasmano / inconclusos de un zarpazo tirados al mar por una muerte / amores en jaque mate peón dama cambiando casas por motores / amores del mal paso mentes en blanco blancos móviles / cauterizando una vez más el cenicero o desandando alguna cicatriz lunar en la cara más oculta que los libros no ven

muy seguramente te decís qué me van a hablar de amor a mí / a los cotidianos transeúntes de la cuerda floja / esternones traspasados por un golpe de amor a contrapelo que a pie de plomo nos echó a rodar mundo o de súbito dio rienda suelta a la estatura / cirujas de la verdadera historia / tensando los músculos para arquear las distancias que una mujer azúcar trazó con sus párpados como alas

amores sobrecubierta a quemarropa y sin trincheras / acantilados amores equidistando de la eternidad y el hastío a sólo un temblor de labios / descarados amores a la intemperie / noctámbulos mendigos de sus propias riquezas / amores mal parados para abrazarse donde ella se llama solamente maría defendiendo las estrellas

(VII)

que la lleve el agua que se la lleve / que se trepane se entumezca se leprose / que se abra la tierra como una planta carnívora y la devore / que el caracol rompa su silencio y le escupa la cara

que la lleve el viento que se la lleve / que le crezcan las meninges y la hipotermia / que le suturen la boca y los brazos al torso / que le quiten su almohada su aparejo su poliédrica mirada / que la lleve el fuego que se la lleve

que se caigan de a uno sus dientes de carcoma / que la trastiendan la profanen la ninguneen
que la inocencia no le valga y la trastabille / que la lleve el olvido que se la lleve

(VIII)

pudo encontrar las huellas de una pantera sobre la superficie de un diamante / el arco destensado la oblicua lluvia mientras caminaba / ese olor que se quita como si fuera un insecto carnívoro sin lograrlo

aquí supo verse al que andaba erguido así de grande era su sombra de su sombra se hablaba está viniendo pronunciaban las ocultas / propinen su pedrada libérense de sus odios mayúsculos porque ya no sabe defenderse coreaban los altavoces / mírenle los devaneos consumados sus ínfimas batallas erráticas que esgrime / déjenlo que ahogue su propio ahogo de sal y espuma

trépenlo como el óxido como el fuego como el alud como la serpiente rodea lo que el hambre reclama / devórenlo en una plaza de una bendita vez bajo luces intensas que pueda vérselo / y oculten los restos de sangre ahora que sólo mira su infinitud de desencuentros / su desecho talismán su lento peregrinar hacia otras formas / no permitan que resista que se incorpore que logre llegar hasta la bruma

(IX)

me voy a comprar zancos / me los voy a comprar / ahí va dirán / el que reptaba / el que una vez dijo otra vez señores / ahí va él / el que apadrina señoritas descalzas y furtivas / el que cosechaba algodón en una bolsa de arpillera para saber qué se sentía / el que buscó siempre las mesas de los vértices los pronombres impropios / el que guarda prolijamente las agendas y era toda una promesa vocearán las vecinas / el que te muerde los labios

el coleccionista de conversaciones el absurdo / el gran colonizador de planicies estériles / va él dirán / allí

me los voy a comprar / y voy a andar por la calle / como si nada

(X)

restos de tu boca / el tiempo apenas se detiene / como un ave que migra

(XI)

los domingos / tiernamente de la mano hacen caminar a un corazón que hace ruido / el overol azul explica un atajo a la rotonda / las señoras llenan de pasto recién cortado pequeñas bolsitas / una niña pierde la cabeza por un copo de azúcar / los autos hormiguean la promesa

en las grandes ciudades la gente se inclina como un gigante a beber sobre un pozo seco / se sientan a almorzar dulcemente sobre enormes panes / se reúnen como caballos frente al matadero a ver cómo aterrizan los aviones / se dictan amor indefinidamente los oscuros

no te atrevas a mirarme mientras yo te nombro ya te dije / allí los edificios mi colmena / mi ordenada filigrana de sepulcros

un paisaje febril que pronto enmudece / barriada que ya corea su propio olvido en pequeñas casas/ amuradas las puertas a siete cerrojos viven su ración de espera / peinan su ínfima deidad de claroscuros/ ya es tarde ya es hora quizás mañana

¿ quién es el que ladra? / quién sabe / es afuera / y vos hoy tuviste ese gesto que me hizo respirar profundo

6 Comments:

Blogger paula varela said...

otra vez
empecé a caminar tu poesía
y caí en el hueco /
en la profundidad sensible
y en las absurdas sinrazones
opuestos / igualdades
lo diminutivo y lo grande /
tu cotidianeidad de altura
y en la inclinación /
en la oblicua humedad del ser uno y el ser otro
encontré un resquicio /
encendí la lumbre
y por fin / pude ver tus ojos.

2:53 p.m.  
Blogger MARAIA BLACKE said...

Hola!...llegue hasta aqui andando sin buscar nada y me encontre algo muy bueno y hasta casi un susto... porque tu "...de este lado/ que no es el mismo / ya no me parezco a mi..." me ha recordado un poema guardado, escondido casi, porque fue el primero...porque antes jugaba, garrapateaba...
Alli comienzo " A vuelta de espejo, me desconozco, porque no puedo ser yo ese reflejo, entonces me pregunto confundida que mujer es virtual y cual mentira..."

Bueno, disculpa si te resulte pesada, pero recordé por sobre todo "el planteo existencial"

Tienes muy buenos poemas aqui
Sdos.

5:39 p.m.  
Blogger JR said...

gracias a Paula conozco este espacio y lo disfruto , suerte en tu camino hermano de poesía.

11:54 a.m.  
Blogger paula varela said...

y yo espero...
y regreso
y sé
que tarde o temprano
me toparé con tus nuevas palabras.

11:12 a.m.  
Blogger Recomenzar said...

Te encontré en lo de Alicia me gustó tu blog.te dejo abrazos

11:36 a.m.  
Blogger paula varela said...

me gusta volver a estos acantilados
donde el agua del mar
sigue rompiendo en mi cara.

10:29 p.m.  

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