21.10.05

LO DEMÁS ES PURO VERSO (1989)

Poemas de la Antología Lo demás es puro verso, junto a jorge Felippa, Roberto Miranda, Heraldo Giordano y Yolanda Cabral

(I)
Estoy
en el límite más opuesto a tu tacto

ahí
en el abismo justo
del que nada saben tus pulgares

(II)
De las dos muertes
hoy quiero hablar de la perfecta muerte animal
llámese cáncer vejez o mano suicida

me cuesta entender cómo situamos a los muertos
derechos horizontalmente en sus ataúdes
y no en posición fetal si se trata de un retorno
cambiando espermatozoides por larvas
sueño de un hijo por cenizas
y el implacable olvido por la infancia del abuelo
y así hasta Eva
y Adán
pobrecito
con sus testículos soñando toda la humanidad

se sentían solos

pero alguna soledad mayor
la del viento
los echó a rodar mundo
y viento es sólo si en algún momento se lanzó a correr
antes era todo viento aprisionado
brisa quieta nada perfecta

hoy el viento sigue su derrotero
su vuelo hacia el final
algún día comenzará a hundirse
dejando atrás al nombre del último hombre
que no será más que premonitorio para cerrar el círculo
usará las mismas letras pero al revés
Nada será el último hombre

y se hundirá el viento
nuevamente toda brisa quieta
nada perfecta
gris
como un árbol en la plenitud del invierno
hasta que la poesía
no tolere más tanta eternidad no leída
abra los ojos y deje correr
volar
al viento otra vez

(III)
Cae
un día más en la cuenta
recién con eso de la pasta dental
y los húmeros pesados

hasta que son leprosas cuatro las paredes
trece los martes
o las madrugadas cada tanto
y uno decide
cambiar los roles con su corbata
colgándose
sobriamente floreado
o a rayas
sin pedir permiso

(IV)
Dónde la fuente si se camina siempre.
Dónde el refugio antes del zarpazo letal.
Donde el vértice de este sendero tan estrecho.

Dónde la verdadera muerte
cuando comenzamos a quedarnos
solos
viviendo a pesar de los muertos.
Dónde el límite cuando irrumpe el pesimismo.
Dónde el fugaz resplandor
en esta angustia de sarmentosas manos
que horadan la noche como serpientes.
Dónde el hombre
dónde.

Y porque sólo somos este dolor inefable
seguimos
a contrapelo.

(V)
Hay que lacrar las persianas
porque de las hienas
sólo se espera hiel y desacaro

más si yo fuera
sólo carroña
me hundiría en la tierra.

(VI)
A Alejandra Pizarnik

Si no fuera por vos
y tantas otras alejandras
creería
que alguien vendrá
a golpear la puerta con una dirección equivocada
a vender un pan casero
o sencillamente a verme
sin saber que lo suyo
es un acto heroico.

Si no fuera por vos creería
que alguien acude siempre
en el momento exacto
sin saberlo
a salvarte.

(VII)
Sos tan
pero tan buena
que cotidianamente el odio
te busca para rendirte cuentas

el pobrecito
deja sus ropas
sobre tus pestañas
y se va
con la conciencia menos tranquila

después yo
me pregunto
dónde carajo
dejé mis pantalones

(VIII)
Soy
senil jinete de tus cadencias

molinos a viento tu pelvis
amor.

(IX)
Ya no espero
la luz verde en tus esquinas
te cruzo en rojo
peatonal e imprevistamente

te miro a través del ojo de la cerradura de mi ojo
para descubrirte
desnuda
en tu estatura
escribiendo alguna página más
sobre tu placenta en blanco

(X)
Tendré que hacer un pacto con las noches tus cómplices:
que retornen mis rostros diurnos antes de los amaneceres
o que abandonen esa obsesión tuya de quedarte en mí.